Nadie tiene el derecho de decir: “Rebélese usted por mí, va en ello la liberación final de todo hombre”. Pero no estoy de acuerdo con quien dijese: “Inútil sublevarse, siempre será lo mismo”. No se hace la ley para quien arriesga su vida ante un poder. ¿Se tiene razón o no para rebelarse? Dejemos la cuestión abierta.